“Transformar a un príncipe en una rana no es nada extraordinario y se consigue con relativa facilidad. Cualquier malhumorado jefe de sección lo lleva a cabo a diario. Pero transformar a una rana en un príncipe, eso exige en alto grado arte o magia o amor”.
1 comentario:
...Que te puedo decir... me quedo sin palabras, no habia conocido a alguien que sintiera asi. dios te ama.. ;-). (y mucho.. jeje)
T.A.L.O.K.
Ana Cris
Publicar un comentario