sábado, 25 de octubre de 2008

Vapor


De nuevo tu sonrisa, tus dientes tan blancos, tus ojos que también ríen ahora sólo para mi. No huyes más. Que cercana, como siempre quise tenerte. Puedo contarte las pecas finalmente. Tu cabello elevado por el viento, acaricia mi cara. El contraste de tus suaves manos con las mías, torpes y atolondradas. No esquivas mi mirada. Es una tarde perfecta; acaba de llover, hasta un arcoiris que sale digo que es para ti. Me abrazas y yo me siento el Rey. Una bandada de pajarillos danzan en el aire formando un corazón. Me aceptas un helado, dices que sólo uno, para comernoslo los dos.... ¡De no creerse! ¡Dios! la vida me sonríe. Un tren pasa frente nuestro. ¿Cómo? ¡Sin vías! De no creerse, su silbido suena identico... Que mi despertador.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Buen dia Enrique!

Solo paso a saludarte y desearte un excelente dìa, "que lo mejor que te sucedio ayer sea lo peor pueda pasarte hoy". Suerte !

Hasta luego

Ivy Miranda dijo...

Maldito despertador!!!, es que aterrizar en la realidad a veces duele, a veces da coraje...

Un abrazo, sigue soñando...