Atardece. Lunes 23 de marzo 2009. El sol se ha ocultado tras las montañas del poniente. Sus últimos rayos alcanzan las nubes que están sobre la ciudad dándoles un hermoso color rojizo, un atardecer de fuego. Es un regalo más, lo disfruto todo para mi. El viento acaricia mi cara; cierro mis ojos... es como dejarme querer, aprender a dejarme querer. Gracias como te llames, donde quiera que estes, como quiera que seas por este presente único. Quizás el fuego no es tan malo. Por eso pasamos un infierno juntos. Quisiera contarte tantas cosas. Que tengo miedo, que la confusión y el dolor me visitan muy a menudo. Que no soy tan fuerte. Tú me dices en tus mensajes, que cuando soy más debil es cuando soy realmente fuerte; pues sólo los valientes lloran por Amor, eso no me exime del dolor. Siento que muero lentamente sin haber aprendido a vivir. Si pudiera verte un instante.
Que alguien no me quiera como yo quiero, no significa que no me ame con todo su ser. A veces detesto esta manera terca de amar. Es bueno irme y hacerme olvidar.
1 comentario:
Corazon yo te amo, tal vez no como tu quisieras pero en realidad lo que siento por ti va mas alla de lo que tu pudieras imaginar.
Cierra tus ojos y en un instante me veras, porque cuando cerramos nuestros ojos somos uno solo y nos amamos y nos queremos.
Te dejo un fuerte abrazo y un beso.
Bye
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