“Transformar a un príncipe en una rana no es nada extraordinario y se consigue con relativa facilidad. Cualquier malhumorado jefe de sección lo lleva a cabo a diario. Pero transformar a una rana en un príncipe, eso exige en alto grado arte o magia o amor”.
miércoles, 10 de septiembre de 2008
Palabrillas...
Halocímbalo: Rayo de luz oscilante.
Polifutureando: Imaginando diversos panoramas augustos del mañana.
Enamorustrado: Decepcionado pero aún enamorado.
Pensactiva: Mujer que mientras nos acaricia, su vista se pierde en el horizonte.
Gratitrémulo: Temor de agradecer.
Taciturnoche: Una noche a solas, callado.
Diluciyendo: Sacando conclusiones, basadas en hechos imaginarios.
Lloriendo: Reír llorando.
Vagarolar: Dar la vuelta en el auto.
Pretulto: Pretexto oculto.
Fabutástico: Fabuloso y fantástico.
Serendcuentro: Encuentro inesperado agradable.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario