martes, 19 de julio de 2011

Madre




¿Cómo retomar un camino que se quebro? Cómo recomenzar otra vez, sin ganas, sin un motivo. Intentando alzar el vuelo en un cielo que perdio el azul. Donde acomodo este dolor huerfano, las lagrimas que no brotan. ¿Que hago con tus pequeñas cartas llenas de ternura para tu niño grande? Una extraña ave ha hecho su nido en mi corazón quebrantado. De repente siento el calor de tu abrazo, más no escucho tu risa, tu pequeña canción. Que manera de amar, hasta hacer polvo el cuerpo. Ahora lo sabes todo. Tu comprensión es infinita. Sigues viva. La muerte no existe. Te extrañaba Madre Mía, Bienvenida a mi Corazón otra vez.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Quien no extrañaría a una madre? quien no estaría agradecido (a) con ella?? Sólo aquellos que no tienen corazón, sensibilidad, agradecimiento o simplemente la "obligación" por haber cuidado de esos hijos cuando iban a la escuela,enfermaban, llevarlos al médico,cuidar en el hospital cuando hubo necesidad, dar consejos, alimentar adecuadamente, cuidar de ellos,quererlos, amarlos, educarlos cuando niños y encima de todo, atender y estar al pendiente de sus nietos.
Sólo aquellos hijos ingratos que tienen la necesidad, la prisa, urgencia, de que esa madre se vaya de este mundo, con su tristeza, amargura, desolación y agradecimiento por aquellas personas que nos preocupamos y nos dimos cuenta de esos HIJOS INGRATOS.