
He sido malo con mi perro. Tiene ahora 5 meses, es pastor alemán. Pero él me ama a pesar de mi maldad. Lame la mano que a veces lo castiga. Y cuando me ve llorar, pone sus patas en mis rodillas, lame mi cara en silencio y mueve su cola despacito. Me aguarda todo el día más de 15 horas, para estar conmigo sólo un momento. Está al último de lo último. Necesito organizarme para convivir más. Él es mi compañero en las caminatas nocturnas, y miramos juntos las estrellas desde donde tu perro te mira. Quisiera ser como mi perro; lanzarme a abrazar sin pensarlo a la gente que quiero, cuando la veo. Un abrazo.
3 comentarios:
No lo pienses sólo abrazalos, quizas mañana sea tarde.
COMO RESULTA DIFICIL, PARA ALGUNAS PERSONAS, EXPRESAR LAS EMOCIONES CON LENGUAJE CORPORAL, DEBERIAMOS APRENDER HACERLO... CREO QUE NOS HARIA SENTIR MUCHO MEJOR, VAYA VENTAJA QUE TIENEN LOS ANIMALES, A ELLOS, NO SE LES DIFICULTA.
KATY SM
mmm hola, vine a ver si ya hiciste las paces con 'aquél'... :) espero que sí...
saludos
Publicar un comentario